Fotografía: Chris Cuffaro
Una voz como pocas y sólo cuatro discos de estudio como solista bastaron para convertir al británico George Michael en uno de esos artistas que dejan una marca imborrable la música. Una que abre un nuevo capítulo con su temprana muerte este domingo 25 de diciembre a los 53 años de edad.
«Con gran tristeza confirmamos que nuestro amado hijo, hermano y amigo George murió pacíficamente en su casa durante el periodo de Navidad. Pedimos respeto para su familia en estos duros momentos», fue parte del mensaje de su publicista que fue publicado por la BBC, informando que la causa fue una insuficiencia cardiaca.
Se dice que planeaba grabar un nuevo álbum con la ayuda del productor Shahid Khan, más conocido como Naughty Boy (Emeli Sandé, Sam Smith), y que daba los toques finales a un documental que sería estrenado en marzo de 2017 con el nombre de uno de sus grandes himnos: ‘Freedom’. Noticias que llegaban mientras ‘Last Christmas’ (1986) de Wham! resurgía como cada año para ocupar un lugar importante en los rankings.
Ese single navideño fue uno de sus éxitos con el dúo que formó entre 1982 y 1986 junto a Andrew Ridgeley. Pero fue en solitario que logró reconocimiento como compositor y productor, llegando a más de 100 millones de discos vendidos con una acotada discografía que incluye ‘Faith’ (1987), ‘Listen Without Prejudice’ (1990), ‘Older’ (1996) y ‘Patience’ (2004), más el álbum de versiones ‘Songs from the last century’ (1999).
Además del pop y el dance, la obra de Georgios Kyriacos Panayiotou, su nombre real, está cargada de influencias del funk, soul y jazz, estilos con los que encontró su lugar en la industria musical, la misma con la que tuvo serios enfrentamientos judiciales. “Nunca me importó ser considerado una estrella pop. La gente piensa que quiero ser considerado un músico ‘serio’, pero no es así. Sólo quiero que la gente sepa que me tomo muy en serio la música pop”, aseguró a la revista GQ.
A las polémicas musicales de ‘I Want Your Sex’ –se suavizó cambiando ‘sex’ por ‘love’-, o la política ‘Shoot the Dog’, dedicada George W. Bush y Tony Blair, se sumaba su vida privada: fue arrestado por practicar sexo en un baño público, dejándolo registrado en ‘Outside’; fue internado por su adicción al cannabis y el alcohol, protagonizó accidentes de tránsito y una neumonía lo hizo pensar en la muerte.
“Tengo que creer que alguien piensa que todavía tengo trabajo por hacer”, confesó en 2011, un año antes de publicar el single «White Light», en el que repite «estoy vivo». No alcanzó a terminar el disco prometido, pero ahí están “Father figure”, “Praying for time” y “Jesus to a child”, algunas canciones que seguirán sonando por siempre.