Foto: La Tercera Vía

El escenario no es auspicioso pese las diversas campañas y esfuerzos de la política pública chilena: todo indica que para el año 2030, casi 775 mil menores de 20 años serán obesos en nuestro país.

Así lo indica el Primer Atlas Mundial de Obesidad Infantil, documento desarrollado por la Federación Mundial de Obesidad (WOF, por sus siglas en inglés) el que reveló que, en el mundo, serán 254 millones de niños y adolescentes que padecerán de esta enfermedad.

El informe de WOF destaca que de los eventuales 774.647 niños, niñas y jóvenes obesos que tendremos en Chile, 294.235 serán niños entre 5 y 9 años y 480.142, adolescentes entre los 10 y los 19 años, quedando dentro del ranking de este estudio en el quinto lugar en cuanto al primer grupo y en el cuatro cuando se habla del segundo.

Actualmente -y a nivel latinoamericano- nuestro país se ubica en el segundo lugar en el listado de obesidad infantil, después de Argentina.

«El 79,6% de los hombres y el 90,6% de las mujeres entre 10 y 19 años realiza menos de 60 minutos diarios de actividad física», comentó para CNN la nutricionista Solange Parra, quien además afirmó que las políticas públicas relacionadas con este tema (Elige Vivir Sano o la Ley de Etiquetado) «son a muy a largo plazo y son insuficientes para la epidemia que tenemos».

¿Qué hacer para detener estas cifras?

Desde el gobierno, el ministro de Salud, Jaime Manialich sostuvo que una «alternativa a explorar es subir los impuestos a la comida poco saludable», una idea el año pasado también fue planteada por un grupo de investigadores de la Universidad de Chile, quienes precisaron que este aumento debe ser considerado para alimentos ricos en grasas, sodio y azúcar.

Otras ideas provienen de países como Singapur, nación que se convertirá en la primera en prohibir la publicidad de bebidas azucaradas, pues en su población está en una constante guerra contra la diabetes, afección que actualmente padece uno de cada siete adultos.

La medida comenzará a regir en el país asiático a partir del próximo año y contemplará la prohibición de anuncios relacionados con productos como bebidas cola, jugos, yogures y café instantáneo.