Fotografía: @lottyrosenfeld

Grabado, fotografía, videoarte, performance e intervenciones urbanas fueron algunos de los formatos que exploró en su obra Carlota Eugenia Rosenfeld, conocida nacional e internacionalmente con el nombre de Lotty Rosenfeld. La artista visual falleció a la edad de 77 años dejando un gran legado en el arte de resistencia y denuncia ante las violaciones a los derechos humanos en Chile.

“Con profundo pesar nos enteramos del fallecimiento de la artista Lotty Rosenfeld. Cofundadora del colectivo CADA, desde sus grabados y el video arte su práctica artística fue un instrumento de compromiso social”, fue el mensaje con que la ministra de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Consuelo Valdés, informó en redes sociales el fallecimiento de la artista y activista, ocurrido este viernes 24 de julio a causa de un cáncer al pulmón.

Una de las intervenciones más recordadas fue Una milla de Cruces sobre el Pavimento (1979), en los alrededores del Palacio de La Moneda y Avenida Manquehue en Santiago, pero que también llevo a otros lugares icónicos alrededor del mundo durante 40 años, entre ellos la Casa Blanca en Washington, la Plaza de la Revolución en La Habana, el Arco del Triunfo en Paris, el Banco de Inglaterra en Londres y el muro de Berlín.

“No solo me he inclinado en las calles para marcar el + sino que también mi producción de video, que ha sido intensa, ha incorporado los conflictos de la obediencia. Hoy el neoliberalismo promueve formas de arte que tienden al espectáculo, pienso que lo productivo es poner en el espacio público producciones artísticas incómodas a las operaciones de mercado”, contaba en una entrevista a La Tercera en 2019.

Durante los últimos años participó en la muestra Poéticas de la disidencia de la Bienal de Venecia y sus videos fueron exhibidos en el MoMA. Recientemente se publicó el Copiar el Edén. Arte Reciente en Chile (Puro Chile, 2019), libro en el que comparte páginas con Juan Downey, Alfredo Jaar y Paz Errázuriz, y este año cuatro de sus obras fueron donadas al Guggenheim en Nueva York.

No + (Colectivo CADA, 1983)

C.A.D.A. y Mujeres por la Vida

Con Damiela Eltit, Juan Castillo, Fernando Balcells y Raúl Zurita, conformó el Colectivo Acciones de Arte (CADA), realizando intervenciones políticas en el espacio público, como Inversión de escena y Para no morir de hambre en el arte (1979), Ay Sudamérica! (1981), y No + (1983), entre otros trabajos críticos de las violaciones a los derechos humanos durante las décadas de los 70 y 80.

También fue integrante del colectivo Mujeres por la Vida, junto a Mónica Echeverría, Fanny Pollarolo y otras artistas que realizaban creativas acciones político-culturales que buscaban generar un gran impacto en la población. Una historia que se puede revisar con su propio testimonio en el documental Hoy y no mañana (2018) de Josefina Morandé.